La Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) expresa su profundo pesar por la pérdida del hermano Quinto Inuma Alvarado, incansable defensor del territorio y líder activo en la titulación colectiva en Santa Rosillo de Yanayacu-Huimbayoc. Lamentablemente, su fallecimiento se suma a la trágica lista de más de 30 líderes indígenas asesinados en la lucha contra actividades ilegales que amenazan la Amazonía peruana, agravada por la inacción estatal.
El asesinato del hermano Quinto Inuma sucedió un día antes del inicio de la COP28.
Ante esta dolorosa realidad:
1. Exigimos a las organizaciones internacionales y defensores de derechos presionar al gobierno peruano para actuar de inmediato, garantizando la seguridad de quienes protegen nuestros bosques y rechazamos declaraciones gubernamentales sin impacto real en nuestros territorios.
2. Condenamos la negligencia estatal frente a repetidos y violentos ataques a nuestros hermanos y hermanas, quienes, al denunciar legalmente, carecen de la atención necesaria.
3. Urgimos al gobierno a realizar una exhaustiva investigación con respeto al debido proceso y acceso a la justicia, evitando la impunidad en el caso de Quinto Alvarado.
4. Manifestamos solidaridad con la familia, comunidad, el Pueblo Kichwa, AIDESEP y CODEPISAM, comprometiéndonos a buscar justicia para Quinto y todos los defensores indígenas caídos.
El estado peruano es responsable de estos asesinatos, ya que teniendo la ley en sus manos no ha implementado nada, permitiendo la muerte en nuestros territorios.
Wilfredo Tsamash – Presidente de CODEPISAM
Desde el programa de Defensa de Defensores y Defensoras Indígenas de COICA, instamos a las autoridades a no tolerar la impunidad y tomar medidas concretas para proteger la vida de nuestros hermanos y hermanas.
El territorio persiste porque los indígenas lo defendemos, incluso a costa de nuestras vidas.