Quito, 18 de noviembre de 2020


Durante las últimas semanas, los países de Centroamérica están siendo terriblemente devastados por los huracanes ETA y IOTA, los más grandes registrados a nivel del Atlántico en el año 2020. Ríos desbordados, puentes caídos y pueblos inundados son el resultado de estas potentes tormentas que han afectado especialmente a los países de Nicaragua, Guatemala y Honduras.

Mientras aún luchaban contra de las graves afectaciones por el COVID-19, los terribles impactos de los huracanes han afectado mayoritariamente a los pueblos indígenas que viven en las costas de estos países, incluso se ha indicado que existen pueblos enteros que han quedado completamente enterrados.

De acuerdo a la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la cantidad y fuerza de los huracanes este año se debe a varios factores, como la ausencia de un evento de El Niño, la temperatura del océano, los patrones atmosféricos; todos factores vinculados directamente al cambio climático.

Desde la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica – COICA, como organización indígena internacional:

– Nos SOLIDARIZAMOS con los países de Centroamérica, en especial con nuestros hermanos de los pueblos indígenas.

– Hacemos un LLAMADO a los organismos internacionales a destinar ayuda humanitaria urgente que garantice el acceso a los servicios de higiene, la seguridad alimentaria, la salud y la protección de las poblaciones afectadas, sobre todo a los pueblos indígenas quienes históricamente enfrentamos graves situaciones en contra de nuestros derechos humanos y el abandono permanente de los Estados.

– EXHORTAMOS a los Estados a nivel global, a que se active definitivamente el Acuerdo de París y se enfoquen acciones en los pueblos indígenas, que permitan frenar las actividades extractivistas que causan los incendios y la deforestación de nuestros territorios, aun mas ante los evidentes resultados de la pandemia y el cambio climático.

Ante esta crisis mundial sistemática que nos pone ante el abismo del no retorno, no volvamos a la normalidad, volvamos a la madre tierra.

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Amazonía viva, humanidad segura.

José Gregorio Díaz Mirabal
Coordinador General COICA