Bogotá, 21 de agosto de 2025. En la tercera reunión extraordinaria de Ministros de Relaciones Exteriores de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), se aprobó por consenso la resolución que da nacimiento al Mecanismo Amazónico de los Pueblos Indígenas (MAPI), un espacio histórico de participación que reconoce la voz y el rol de los pueblos indígenas amazónicos en la defensa de la selva.

Este resultado se alcanza después de 18 sesiones de negociación inclusiva que definieron su composición, funciones y procedimientos. El MAPI tendrá un mandato amplio para formular recomendaciones a la OTCA en temas clave como:

  • Control de la deforestación y tráfico de especies.

  • Revitalización de las lenguas indígenas.

  • Transmisión de conocimientos y tradiciones ancestrales.

  • Protección de los territorios y biodiversidad amazónica.

Una gobernanza compartida e innovadora

El MAPI contará con una estructura de copresidencia única en el mundo, donde cada país miembro de la OTCA estará representado por un delegado gubernamental y un delegado indígena. Esto asegura paridad, legitimidad y gobernanza compartida entre Estados y pueblos indígenas, consolidando un modelo de cooperación multilateral que coloca a la Amazonía como prioridad global.

COICA celebra este logro histórico

La Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA), como voz regional que articula a más de 500 pueblos indígenas en los países amazónicos, aplaude la creación del MAPI como un avance histórico en la garantía de participación plena y efectiva de los pueblos indígenas en las decisiones de la OTCA.

Este mecanismo responde a una demanda sostenida de COICA en los últimos años: que la Amazonía no puede pensarse ni gobernarse sin sus pueblos. La creación del MAPI es un triunfo colectivo que refuerza la lucha indígena por el territorio, la vida y la autonomía, y que sienta un precedente global de justicia climática e interculturalidad.

Un ejemplo global de cooperación

Con la puesta en marcha del MAPI, los pueblos indígenas amazónicos serán protagonistas activos en la agenda climática y ambiental, y la Amazonía contará con un espacio legítimo de diálogo permanente entre gobiernos y organizaciones indígenas.

Este mecanismo se proyecta como un modelo de gobernanza intercultural para el mundo, demostrando que la protección de la selva amazónica y la vida de sus pueblos es una responsabilidad compartida.


Desde COICA reafirmamos nuestro compromiso de fortalecer este espacio y defender la Amazonía viva, porque de ello depende también el futuro de la humanidad.

#AmazoníaVivaHumanidadSegura