En el marco del evento Amazonía +, realizado en Brasil, la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) participó activamente en la discusión sobre gobernanza, control de incendios y financiamiento directo para la conservación de la Amazonía.

Fany Kuiru, coordinadora general de COICA, destacó la importancia de elevar las voces territoriales y fortalecer los mecanismos de gobernanza para que los recursos lleguen directamente a las comunidades indígenas.

En este contexto, COICA juega un rol clave en el segundo componente del programa asociado con Expertise France, centrado en el fortalecimiento de la gobernanza y la participación de las mujeres indígenas.

«Nuestra lucha hoy es elevar las voces territoriales, porque la COICA es de Pueblos y Nacionalidades y nosotros como líderes estamos al servicio de ellos», afirmó Fany Kuiru durante su intervención.

Un tema central abordado por COICA en Amazonía + fue el financiamiento directo para las comunidades indígenas. Actualmente, muchos recursos se quedan en intermediarios, limitando el impacto real en los territorios. «El trabajo de conservación de la Amazonía está en territorio, no está en las organizaciones. Como COICA, vendríamos siendo una intermediaria, pero buscamos que los fondos lleguen directamente a las comunidades», explicó Kuiru. Para ello, se plantea la creación de un mecanismo de financiamiento directo con una estructura de gobernanza que garantice su adecuada distribución.

La participación de COICA en eventos globales como Amazonía + refuerza su compromiso con la defensa de los derechos indígenas y la protección de la Amazonía. La organización continuará impulsando iniciativas para fortalecer la gobernanza, asegurar la participación de las voces territoriales y garantizar que los recursos destinados a la conservación lleguen efectivamente a quienes protegen la selva.

Con la segunda reunión de Amazonía + prevista en Ecuador, COICA seguirá incidiendo en la necesidad de consolidar estrategias de financiamiento directo y fortalecer los procesos de gobernanza indígena. El reto es claro: garantizar que las comunidades sean protagonistas en la gestión de su territorio y en la lucha contra la crisis climática que amenaza a la Amazonía.